Amo la forma en que me dañas

Siempre ahí. Siempre presente en algún lugar de mi. Te amo pero me dañas, no sé si será un te amo aunque me dañes o simplemente un te amo pero me dañas. Con el solo echo de saber que en tu corazón no hay espacio para mi, me derrumbo por dentro aunque no se persiva por fuera. Que más hacer, quisiera que la respuesta me la entregaras tú mismo. Pero no es así, y nunca lo será porque nuestras almas al parecer no están destinadas, pero a pesar de eso mi alma seguirá eternamente luchando por lo contrario. Aquella lucha constante al parecer es la que me sigue manteniendo viva, por ahora...